En negocios como cafeterías pequeñas, tiendas de barrio, heladerías o food trucks, el espacio en el mostrador es muy limitado. Los TPV “all in one” son la solución perfecta: compactos, elegantes y funcionales. Integran pantalla táctil, CPU y en algunos modelos incluso lector o impresora. Esto permite trabajar cómodamente sin llenar el mostrador de dispositivos separados. Además, su diseño moderno mejora la apariencia del negocio y da una imagen más profesional al cliente final.
Los TPV todo en uno son equipos diseñados específicamente para uso comercial continuo. Esto significa que sus componentes están optimizados para un rendimiento estable durante largas jornadas. Necesitan menos mantenimiento que un PC tradicional y reducen el riesgo de fallos derivados de cables sueltos, fuentes externas o problemas de compatibilidad. Esto los hace ideales para emprendedores y pequeños negocios que buscan algo eficiente, económico y preparado para funcionar desde el primer día.